Querida madre: Al
igual que la urraca vuelve al nido en busca de su amor, que no ha perdido, yo
regreso a vuestro lado porque os quiero, sois mi estímulo, mi apoyo y mis
confidentes amigos.
¡Claro que ya es
tiempo de volver!
¡Qué rápido se han pasado los meses! atrás se quedó un verano
desbordante de calor ¡cuánto he añorado
la brisa de nuestro mar!
Quiero iniciar mi
regreso dando las gracias a todos aquellos que os habéis acordado de mí en
estas largas vacaciones, y me habéis arropado con vuestros cariñosos
comentarios.
En especial, quiero
dejar constancia de mi agradecimiento a una buena amiga: Ámbar.
Como tiene la
virtud de estar siempre muy pendiente de todos, me ha dedicado una entrada en
su blog para felicitarme en el día de mi cumpleaños. Ha sido muy emotivo cuando
me encontré con vuestras felicitaciones ¡qué feliz me habéis hecho!
Para todos, mi
cariño y mil gracias.
Contigo, en la
orilla del mar
Contigo, paseando
por la playa
Con tus manos en mi
piel
Acariciando mi
cara.
Contigo, sin rumbo
fijo
Contigo, bajo un
puente o una cabaña
Yo me iría al fin
del mundo
Tan solo por volver
a ver tu cara.
Contigo descubrí el
amor
Contigo supe volar
sin alas
De noche te veré en
mis sueños
Y dormiré abrazada
a tu alma.
Ahora, por no
perder la costumbre, voy a haceros un aperitivo que probamos este verano en
casa de mi hijo Willi.
Nunca me cansaré de
deciros que, para conservar el amor, es muy importante estimular, día a día, el
estómago de la persona amada.
Para todos vosotros, hoy os invito a que
probéis esta tostada de paté de oca con queso de cabra:
Ingredientes: Una
lata de paté de hígado de oca, pan cortado en rebanadas, una cebolla grande, un
rulo de queso de cabra, aceite y sal.
Preparación:
1- Cortar el pan, tipo payés, en rebanadas y
ponerlas a tostar en el horno. Reservar.
2- Pelar la cebolla, cortarla en juliana fina y
ponerla a pochar lentamente en una sartén o cazuela con un poco de aceite y
sal. Cuando esté, escurrir y reservar.
3- Cubrir cada rebanada de pan tostado con dos
rodajas finas de paté de oca.
4- Sobre el paté, poner láminas de queso de
cabra.
5- Distribuir la cebolla pochada sobre cada
rebanada y meter al horno unos minutos. Servir las rebanadas divididas en tres
partes, así los bocaditos serán más pequeños y se reparten mejor.
Os dejo degustando esta rica receta, espero
que os guste tanto como a nosotros.
Prometo ir
visitándoos, poco a poco, por el orden en que me habéis ido dejando vuestros
cariñosos comentarios. Os reitero mil gracias.
Madre, todas las
cartas que te he ido escribiendo a lo largo del verano, te las iré mandando en
mis sucesivas entradas.
Ahora, para
finalizar, os envío cariños en un fuerte abrazo.