Lo
cierto es que allí se respira. Cuando se mete el sol, allá al atardecer, corre
una brisa muy agradable que aprovechamos para cenar al aire libre y prolongamos
la sobremesa hasta las tantas, si no fuese porque me da miedo que se acerquen
perros, gatos o algo más grande, me tumbaría en el césped y dormiría feliz toda
la noche.
En
la ciudad es agobiante el calor que estamos pasando, mi casa con una
orientación este-oeste, es un verdadero horno ¡Buenísima para el invierno!
Ayer
por la tarde, de pronto, el cielo se oscureció y, al poco, las nubes
descargaron con ganas toda el agua acumulada, parecía una riada, lástima que
haya durado tan poco, El calor acumulado
en el asfalto, pronto la evaporó.
Cuando
estoy en el pueblo y según mi costumbre, no dejo de ir al camposanto, está tan abandonado…
Siempre
riego vuestras flores, he cambiado las petunias por vincas, creo que aguantarán
algo más, no sé qué pasa con las primeras, al poco aparecen en sus hojas
manchas blanquecinas y se vuelven pegajosas, pronto se arrugan y mueren.
Todo
es efímero en esta vida, pero mientras permanezcamos aquí, disfrutemos del
momento, aunque sea recordando al amor.
Escuchar
esta canción: SIN TI
SI
SUPIERAS…
INTENTO
DESHOJAR RECUERDOS,
DESMENUZAR
MOMENTOS,
DESGRANAR
SENTIMIENTOS
Y
DEJAR QUE FLUYAN LIBRES
PARA
LIBERAR MI AFLICCIÓN
LA
DE VECES QUE HE INTENTADO
PONERLES
ALAS,
LANZARLOS
AL VIENTO
Y AL
LLEGAR A TU ENCUENTRO
REVIVAS
LA PASIÓN QUE NOS UNIÓ.
¡SI TÚ SUPIERAS…!
QUE
AÚN TE LLEVO EN EL ALMA
ANIDAS
EN MI CORAZÓN
Y,
EN MIS PEORES MOMENTOS,
TRATO
DE REVIVIR OTROS TIEMPOS
EN
QUE, MUY JUNTOS. NOS HACÍAMOS
DULCES
PROMESAS DE AMOR.
CIERTO,
MUCHAS SE HAN CUMPLIDO.
PERO
OTRAS, COMO ENVEJECER LOS DOS,
HOY
SON LEYENDA QUE NARRA
¡UNA
DE LAS MÁS BELLAS HISTORIAS DE AMOR!
Y
como siempre que escribo pongo algo para alegrar la vida y mantenerla, voy a
prepararos unas carrilleras al vino tinto.
CARRILLERAS
DE CERDO AL VINO TINTO:
INGREDIENTES:
Un kilo y medio de carrilleras de cerdo, dos puerros, 2 o 3 zanahorias, dos
cebolletas grandes, medio litro de vino tinto, un litro y cuarto de caldo de
carne (en mi caso utilicé agua con dos pastillas de caldo de pollo), tres
dientes de ajo y una o dos hojas de laurel, según guste.
PREPARACIÓN:
2-Según
vayan cogiendo un bonito color dorado, se retiran a una fuente y se reservan.
4-Los
jugos que han ido soltando las carrilleras al sellarse en el aceite caliente,
quedan adheridos al fondo de la cazuela formando una costra. Así tiene que
quedar el fondo.
5-Si
fuese necesario, se añade un poco más de aceite a la cazuela y es el momento de
echar todas las verduras que teníamos picadas, dejar que se vayan pochando
lentamente. El jugo que sueltan las verduras disolverá la costra que se había
formado en el fondo.
6-Poner
una cazuela al fuego con el agua y dos pastillas de caldo desmenuzadas, (mucho
mejor si se tiene hecho un caldo de carne), dejar que se disuelvan bien.
Reservar.
7-Cuando
las verduras están pochadas, se añaden las carrilleras y las hojas de laurel,
incorporar también el jugo que han soltado mientras reposaban en la fuente.
8-Regarlas
con el vino tinto, subir el fuego y dejar reducir un rato.
9-Cubrirlas
con el caldo de carne.
10-Bajar
el fuego y dejar que se vayan haciendo lentamente por espacio de unas dos horas
más o menos. Veremos que el agua se va evaporando y las carrilleras van
cogiendo un color oscuro y brillante.
11-Se
sabe si están tiernas cuado pinchan con facilidad. Retirar del fuego, dejar
reposar un rato y servir. Os encantarán.
Y ya
cabo por esta semana, volveré para seguir enviándoos mis cariños en apretados
abrazos.