Querida
madre: Este fin de semana he alterado mis rutinarias tareas semanales. No hubo
comida familiar, tampoco hemos ido al pueblo y he dado unas breves vacaciones a
mis queridos pucheros.
Kasioles se animó a ir, con dos de sus hijas, a conocer Avilés y Oviedo. ¡Qué ganas tenía de acercarme a Asturias!
Pese a que las previsiones del tiempo no eran nada halagüeñas, ya que la lluvia iba a estar presente en los tres días que duraría nuestra estancia, no nos arredramos y el sábado, antes de las nueve de la mañana, salimos en dirección al norte.
No os podéis imaginar lo que he disfrutado durante el camino al ver ese paisaje tan verde, por momentos me creía que me acercaba a mi querida Galicia.
Desde
el coche no pude por menos que disparar alguna foto, lo que pretendía no era
perfección, me contentaba con grabar los amarillos chillones de la retama y las
tonalidades de verde de la vegetación que se extendía a cada lado de la
carretera.
El cielo, pese a estar cubierto de nubes algodonosas que anunciaban lluvias, daba paso a un sol que se metía entre ellas para iluminar el paisaje.
HACÍA TANTO TIEMPO QUE NO ME OCURRÍA….
FUE
ENTRAR Y….
ESTABA
ALLÍ
ERA
UNA SIMPLE FOTOGRAFÍA
Y
AUNQUE NADA PODÍA DECIRME
ENSEGUIDA
SUPE
QUE
RECLAMABA MI COMPAÑÍA.
ME
ACERQUÉ,
LA
OBSERVÉ LARGO RATO
Y ME
IMAGINÉ SU VIDA,
EN
UN TIEMPO FUE DICHOSA
LO
TUVO TODO:
JUVENTUD,
FORTALEZA Y VIDA
Y
ESCUCHÓ LAS PROMESAS
DE
DOS FELICES AMANTES
QUE
TODO LO COMPARTÍAN.
HOY
SE SIENTE ABANDONADA,
SOLA,
VIEJA Y PERDIDA,
YA
NO TIENE ILUSIÓN,
PERO
NECESITA DE ALGUIEN
QUE
LE DÉ CARIÑOS
PARA
PALIAR SU MELANCOLÍA.
Y
como ya se acerca la hora de comer, hoy prepararé un pescado al horno que os va
a encantar, se trata de un gallo a la mantequilla de ajo y perejil.
INGREDIENTES:
Un gallo grande, medio calabacín, una cebolleta y dos tomates, sal, pimienta
blanca y aceite de oliva.
PARA
LA MANTEQUILLA DE AJO Y PEREJIL: Un trozo de mantequilla de unos 100 gramos, un
diente de ajo, el zumo de un limón, pimienta blanca y una cucharada de perejil
muy picado.
PREPARACIÓN:
3.-Espolvorearlas
con sal, pimienta y un hilo de aceite. Llevar al horno precalentado a 180
grados y dejar unos 20 minutos.
4.-Mientras
se ablandan las verduras, limpiar el gallo, darle dos cortes en el lomo e
introducir en cada uno medias rodajas de limón. Salar y reservar.
5.-Cuando
las verduras casi están, se saca la fuente del horno, se coloca el gallo encima
de las verduras y se riega con un hilo de aceite. Volver a meter al horno a
190-200 grados durante unos 10-15 minutos.
6.-Mientras
se va haciendo el pescado, se coloca una sartén sobre el fuego con un poco de
mantequilla, dejar derretir.
8.-Aromatizar
con una cucharadita de pimienta blanca, el zumo de un limón y la cucharada de
perejil muy picado. Remover y dejar dos minutos sobre el fuego.
9.-Cuando
el pescado está en su punto, se retira del horno y se vuelca por encima la
preparación anterior. Servir y degustar, os encantará.
En
mi próxima carta os seguiré contando más cosas de nuestro viaje, me he quedado
con ganas de volver.
Y
ya, para finalizar, me despido con besos y abrazos de todos para todos.