
Hoy quiero continuar con lo que te contaba en
mi carta anterior.
¿Recuerdas que
había quedado con Sandro? Pues bien, antes de salir de casa, perfectamente
arreglada, me había dado el visto bueno mirándome al espejo.
Me devolvió una imagen que acrecentó mi ego,
estoy todavía fenomenal, me dije, y fue entonces cuando recordé las palabras
que siempre me repetías cuando me arreglaba para salir con Anthony ¡Qué guapa
vas, hija mía!
Y siguiendo con mi
costumbre de no llegar nunca tarde, aunque sólo salga con alguna amiga, miré la
hora que marcaba el reloj de pared, (era de mis abuelos paternos y aún conservo
como una joya) y me apresuré a salir de casa.
Cerré la puerta con
llave y, antes de que llegase el
ascensor, escuché el sonido del teléfono.
Volví a abrir lo
más rápido que pude la puerta y, sin cerrarla, corrí a coger el teléfono antes
de que parase de sonar.
¿Diga? Al otro lado
escuché la voz de Sandro.
Me decía, sin darme más explicaciones, que le
era imposible quedar conmigo, que lo sentía mucho, que ya me llamaría.
Cerré la puerta y
fui a sentarme al sofá del cuarto de estar.
No sabía que pensar
pero, de pronto, recordé que, al poco de casarme, le había escrito varias
cartas y nunca más había vuelto a tener noticias suyas.
Guiada por mi
impulso, sin pensarlo dos veces, escribí:
NO TE VOLVERÉ A
ESCRIBIR
Y MUCHO MENOS, A
HABLARTE,
LA AMISTAD TOCÓ A
SU FIN
SIN CAUSA
JUSTIFICABLE.
NO ACIERTO A
DESCUBRIR
EL MOTIVO QUE CAUSÓ
ESTE SILENCIO
PATENTE
QUE SÓLO CAUSA
DOLOR.
A VECES, LOS
SENTIMIENTOS,
NO SE AVIENEN A
RAZONES
SE QUIERE, AÚN SIN
QUERER,
LO DICTAN LOS
CORAZONES.
OTROS, POR EL
CONTRARIO,
TIENEN RAÍCES
AÉREAS
Y AL MENOR GOLPE DE
VIENTO
SE DISEMINAN POR
TIERRA.
RECOJAMOS LAS
MIGAJAS
DE AQUELLO QUE
PARECÍA
UNA SINCERA AMISTAD
¡O ESO YO ME CREÍA!
DE TODO SE APRENDE
EN VIDA
AUNQUE, POR SER TAN
HUMANOS,
VOLVAMOS A TROPEZAR
Y COMETER LOS
ERRORES
QUE HOY, SIN
PIEDAD, JUZGAMOS.
Y como ya tengo que
preparar algo para comer, aprovecho para participar en el reto BBSS, se trata
de hacer un plato bueno, barato, sencillo y sano.
Como este verano he
recogido gran cantidad de alubias verdes,( he congelado muchas), recuerdo haber
ideado, sobre la marcha, una ensalada templada con pulpo y, como ha gustado
mucho a todos, hoy la volveré a hacer:
INGREDIENTES: Dos
tentáculos de pulpo cocidos, medio kilo de alubias verdes, 3 huevos, dos o tres
tomates, dos pimientos rojos, una patata grande o dos pequeñas, dos dientes de
ajo, sal, aceite, perejil y vinagre.
PREPARACIÓN:
1- En una cazuela, con agua y sal, echar las
alubias verdes limpias y troceadas. Dejar cocer hasta que estén tiernas.
Escurrir y reservar.
2- Mientras, asar al horno dos pimientos rojos
o abrir un bote de pimientos asados.
3- Cortar los pimientos en tiras y aliñarlos
con sal, ajo y perejil muy picados, aceite y, si gusta, un chorrito de vinagre.
Reservar.
4- Pelar las patatas y cortarlas en rodajas de
menos de un cm de grosor. Echarlas en una sartén con abundante aceite, dejar a
fuego medio para confitarlas.
5- El secreto es que se vayan friendo muy
lentamente.
6- Después de un rato, tapar la cazuela.
7- Cuando las patatas se vean melosas, se
destapa y se sube el fuego, dejarlas unos minutos hasta que se doren un poco.
8- Retirarlas a un plato con un papel
absorbente para eliminar el exceso de grasa que pudieran tener.
9- Ahora hay que montar el plato. En una fuente
redonda, poner de fondo las alubias
verdes.
10- Cubrirlas con tiras de
pimientos rojos y verter por encima su aliño.
11- Sobre los pimientos, poner
las patatas confitadas.
12- Colocar, por todo el borde
de la fuente, rodajas de tomate y de huevo cocido.
13- Rematar el plato, cubriendo
todo el centro, con el pulpo cortado en rodajas y aderezadas con sal gorda, pimentón dulce o picante (a
gusto) y un hilo de aceite de oliva.
14- Degustar esta ración. Se
consigue esta forma colocando los ingredientes, por capas, dentro de un aro
circular.
Y con esta rica
receta voy a dar, por esta semana, finalizada mi carta.
Ya sólo me queda
enviarte cariños y abrazos de tu hija