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viernes, 17 de octubre de 2014

CONFITURA DE MANZANAS E HIGOS

Querida madre: Esta semana anduve un poco atareada. He hecho tantas 
cosas, que tuve la sensación de que los días tenían menos horas.

Pero es bueno que me sienta así, tú bien sabes que, otras veces, el tiempo se me hacía interminable mientras pensaba en vosotros y me dolía el alma al recordar tantos momentos felices que he pasado a vuestro lado.

Cansada de ver, cada día, el mismo paisaje a través de mi ventana, me decidí a cambiar de actitud ¿Qué te imaginas que he hecho? ¡No te lo vas a creer!

No lo pensé dos veces y me he ido a matricular en la Universidad de Mayores. Las clases están a cargo de los mismos profesores que puede  tener tu biznieto, el mayor, en la Universidad.

Ya he asistido a la primera clase y, para mi sorpresa, las aulas están repletas de gente que siente inquietudes por seguir aprendiendo.

Cuando llegué, me senté en la cuarta fila (por aquello de que pasaría desapercibida ante los ojos del profesor) pero pronto me he sentido integrada, al poco. me he visto rodeada de dos alumnos que me hablaban como si me conociesen de toda la vida ¡Con lo introvertidos que  eran los castellanos! Pienso que, llegando a la madurez, la gente rompe barreras y siente la necesidad de comunicarse.

Cuando llegué a casa, me puse a escribir y a escuchar esta canción:



Otoño que vuelves
A veces, callado,
Pero de repente….
Te entra la furia
Y, con viento fuerte,
Derribas las hojas
Que me traen recuerdos
De un amor ausente.

¡Qué feliz yo he sido
contigo a mi  lado!

Hoy pido clemencia,
A este otoño despiadado,
Que arrancó de mi vida
Lo que tanto he amado.

¡Déjame que viva!
¡Déjame que sueñe!
Deja que tus aguas
Me laven la herida
Que llevo prendida
De tanto quererle.

Y para no cambiar el ritmo de mis entradas, ya es hora de que entre en la cocina, os prepararé algo dulce que nos remonta al tiempo de nuestras abuelas. Esta receta la he visto en un programa de TV y me recordó a aquellas meriendas de cuando era niña.



A mí me ha llevado un poco más tiempo el hacerla, primero he tenido que ir a la higuera a recoger los higos.

Yo utilicé los de mi higuera, son unas brevas ricas que han madurado en Septiembre.






CONFITURA DE MANZANAS E HIGOS

INGREDIENTES:
Un kilo de higos, tres manzanas reineta, 700g de azúcar moreno, un palito de canela y el zumo de un limón.


PREPARACIÓN:
1-     Lavar los higos, escurrirlos, partirlos por la mitad y colocarlos extendidos en una fuente honda.


2-     Cubrirlos con el azúcar moreno.


3-     Exprimir el limón y regarlos con su zumo. Dejar toda una noche en maceración.


4-     Al día siguiente, veremos que la mayor parte del azúcar se habrá derretido con el zumo de limón y el jugo que han soltado los higos.




5-     Pasar todo el contenido de la fuente a una cazuela, ponerla sobre el fuego y añadirle un palito de canela.


6-     Remover y dejar que cueza todo junto unos 20 minutos lentamente.


7-     Como se formará espuma en la superficie, se retirará con una espumadera.


8-     Pelar las manzanas y cortarlas en dados medianos.


9-     Añadirlos a la cazuela con los higos. Remover para mezclar y dejar cocer otros 20 minutos o un poco más, hasta que la manzana esté tierna.
10-Retirar del fuego y dejar enfriar. Servir.


Sobre una tostada de pan crujiente, en el desayuno o a la hora de la merienda… yo, que no soy muy golosa, reconozco que es una delicia.


Y ahora, madre mía, se acerca el final de mi carta.

Te dejo todo el cariño de esta familia que siempre guarda, en su corazón,  un rinconcito para ti.


Cariños para compartir.


                         Kasioles